Hola Jaramillos,
Este mes mi papá se ha retrasado un poco para contaros
nuestras ‘aventuras’… pero sólo el primo Diego decidió compartir algo en el
blog… sniff, sniff… voy a pensar que somos unos ‘flohhooos’… porque me dicen
que no es por ganas, que es por no ponerse… que ya si eso….
Bueno, mi cuarto mes empezó con las fiestas navideñas, unas
fiestas que supongo que para los mayores son muy entrañables y os hacéis muchos
regalos pero para un niño de tres meses…. Como que es un poco estresante… que
si un montón de gente dándote besos ,cogiéndote y pasándote de uno a otro como
si fueras una pelota… un montón de regalos de los que yo ni me enteré… Mis
papás dicen que estuvieron muy bien las fiestas… supongo que tendrán razón.
El día de noche Vieja me tuvieron despierto hasta las tantas…
pero creo que empezamos el año felices.
Los Reyes esos creo que me trajeron un lego de unas 3000
piezas… ¿o me engañaron y fue un regalo
para mi papá ?
Justo después, el día del cumple de mi padre me llevaron a
la peluquería. La última peluquera que le cortó el pelo a mi padre, hace unos
años ya de eso. Me porté muy bien, bueno… lloré un poco, pero sólo porque tenía
sueño y no me gustaba tener que estarme tan quieto…
Ya me bañan en una bañera de mayores, me gusta mucho porque así puedo chapotear un rato, aunque mi padre sigue insistiendo en ponerme los pelos de punta después de cada baño. Aunque a veces no le dejan...
Este mes los graciosos de mis papás decidieron que tenía que empezar a dormirme solito por las noches… uff… me pasé unos días llorando cuando me dejaban en la cuna, pero ya lo tenemos medio controlado. Al principio probaron a ponerme un montón de juguetes, a ver si así me entretenía, ahora ya vamos por dos peluchitos…
El coche sigue sin gustarme, eso si que no, que es eso de montarme e ir de espaldas a la marcha y solo ver un asiento negro… ni que eso fuera tan divertido. Eso, sí, yo me visto para la ocasión... por si me dejan conducir a mí.
Bueno, espero que os animeis a escribir, que ya me han contado que hay muchas novedades familiares... que yo no cuento no vayamos a divulgar informaciones confidenciales.
Yo prometo más aventuras, ya como papilla...