Hola primos…
Otra vez estoy aquí, ya he cumplido dos meses… y me estoy
acostumbrando al sitio este donde me han traído. Al principio mi cunita era
demasiado grande y me gustaba acurrucarme lo máximo posible, como cuando estaba
en la barriga de mamá…
Pero ahora ya me he acostumbrado, puedo dormir, aunque al
principio me cueste un poco, pero merece la pena porque por las mañanas puedo
acostarme un ratito con mamá y dormir con ellas, es uno de mis momentos
favoritos del día.
Mis padres también han mejorado, cuando me bañan ya no
parece que vayan a hacerme algo perverso, lo disfrutamos y acabo muy relajado y
sonriente… ellos también.
Un día mi papá se empeñó en hacerme el DNI y el pasaporte,
porque en Diciembre nos vamos de viaje, y quería ahorrarse un dinerillo he
intentó hacerme el la foto del DNI, por supuesto no le salió bien pero a mi me
parece que la foto no está mal…
Recibí la visita de unas personas muy especiales, que
hicieron un montón de kilómetros para venir a verme… ¡ Gracias Tita Mayte !me
puse muy contento y pasaron un fin de semana muy divertido con nosotros. Aunque
el tito Jose se empeñaba en darme a beber una cosa que no era leche…
Visitamos a los tíos abuelos Estela y Miguel, conocí a mi
TITO MáS GRANDE, conocido como Chico o Nico, fuí a mi primer picnic y visitamos
a la tita Montse en Sant Cugat… creo que ella también se puso contenta.
Mis papás no paran de pasearme, no me preguntan si me gusta
o no, me llevan y punto, pero sí que me gusta. He ido a la playa pero el agua
estaba muy fría y no me dejaron bañarme…
Ese fin de semana también conocí a mi primo Raul, no pude jugar con él porque no estuvimos mucho rato y me dio mucha hambre, y cuando me da hambre no puedo jugar, tengo que concentrarme en llorar para que me den de comer.
Este mes he empezado a hacer algunas cosas que antes no
hacía, sonrío, intento hablar, aunque solo me salen gorgoritos así que para que
me entiendan un poco estos mayores tengo que seguir llorando, pero no es mi
culpa, no se enteran mucho todavía. También juego en un alfombra con unos
muñecos muy chulos y a veces me quedo un ratito en la hamaca mirando que hacen
mis papás, pero no mucho rato que se acostumbran.
Ahora puedo pasar un ratito jugando con mis papás, nos reímos
y aprendemos cosas… aunque un par de veces he visto que a mi papá le brillan
los ojos un poquito, como si fuera a llorar. Yo creo que no es porque esté
triste, él me dice que está super contento, que es muy feliz conmigo y con
mamá, pero que le gustaría que mis abuelos pudieran verme, jugar conmigo y
estrujarme, aunque solo fuera un ratito… seguro que me ven, estén donde estén J